La lechera Manuka, líder en producción en base a pasto, reafirmó su compromiso con la sostenibilidad al decidir participar de manera voluntaria de una rigurosa auditoría externa de verificación para validar sus cálculos internos de emisiones de carbono, y así obtener la certificación “Huella Chile” del Ministerio del Medioambiente, iniciativa que reconoce a las empresas por sus esfuerzos en gestionar gases de efecto invernadero – cuantificando, reduciendo o neutralizando emisiones.
En este contexto, Manuka ha recibido el prestigioso sello de cuantificación para el año 2022 en el 100% de sus predios lecheros, tras someterse a una auditoría externa de verificación realizada por la reconocida casa auditora ABS Quality. Durante esta auditoría, se evaluaron con minuciosidad la metodología de cálculo utilizada para estimar las emisiones de gases de efecto invernadero y la Huella de Carbono de la empresa.
Diego Troncoso, jefe del departamento de medio ambiente de Manuka, destacó la importancia de que las empresas gestionen adecuadamente aspectos ambientales: “Todas las empresas transitamos nuestro camino hacia la sustentabilidad desde puntos diversos; lo crucial es lograr un progreso continuo, avanzando paso a paso en la implementación de prácticas responsables en las operaciones. Para nosotros, esta certificación representa el fruto de un trabajo arduo y dedicado. Siempre nos esforzamos por mejorar nuestros estándares, en coherencia con nuestra promesa de contribuir de manera positiva al medio ambiente y a las futuras generaciones”.
Con respecto al proceso de auditoría, Troncoso compartió sus impresiones sobre el proceso para obtener el sello Huella Chile: “Durante la auditoría, se aseguró la confiabilidad de nuestras bases de datos de las actividades desarrollas en la empresa y se evaluó la coherencia de nuestra metodología de estimación. Este logro representa un hito significativo, demostrando nuestra adhesión a estándares reconocidos a nivel nacional e internacional.”
Durante cinco años consecutivos, la organización ha llevado a cabo la medición de su huella de carbono, que evolucionó de una evaluación en dos predios piloto, al cálculo sobre el 100% de sus operaciones. Es motivo de satisfacción para la empresa compartir que, anualmente, sus mediciones han permanecido consistentemente – y notablemente- por debajo del promedio mundial en su sector. Este logro refleja sus esfuerzos por especializarse año a año y potenciar todos los beneficios de su modelo productivo basado en el pastoreo, convencidos de que es la forma más sostenible de producir leche de la más alta calidad para las familias de chile y el mundo.